Los Amigos Invisibles: “Ganar el Grammy fue como ir a las Olimpiadas”.

Julio Briceño, José Luis Pardo, José Rafael Torres, Armando Figueredo, Juan Manuel Roura y Mauricio Arcas -integrantes de Los Amigos Invisibles- regresaron a Venezuela con la bandera del triunfo, orgullosos de ser portadores de un Grammy Latino como Mejor Álbum de Música Alternativa, que recibieron sorpresivamente el pasado mes de Noviembre. Satisfacción que alcanzaron luego de su quinta nominación con el sexto disco de su carrera, ‘Comercial’. Por los medios circuló que los artistas no llegaron a tiempo a la ceremonia de premiación y que cuando supieron que habían ganado pensaron que se trataba de una broma.
En el Hard Rock Café de Caracas, los músicos expresaron que “ganar el Grammy fue como ir a las Olimpiadas”, es decir súper emocionante. Destacaron la presencia de artistas venezolanos en al afamado galardón este año, “como Franco de Vita, y Oscar de León en la ceremonia. En los pasillos de Las Vegas te encontrabas a Yordano o el maestro Abreu. Se sentía la buena onda para la industria venezolana que está tan golpeada, nos parece un gran logro”, recalcaron.
A sabiendas de que un premio Grammy es provechoso en la carrera de cualquier artista, el sexteto cuestiona el aporte económico o comercial que les pueda proporcionar, “a nivel material es difícil saber cuál es el beneficio o empuje del Grammy. Pero sin duda sí es una etiqueta que ayuda”. No obstante, la agrupación aclara que ellos no hacen discos con la finalidad de ganar premios, “nosotros no somos Shakira ni Luis Fonsi ni Reik que los promueven en televisión. Somos una banda alternativa y hacemos la música que queremos, más aún ahora que tenemos disquera propia”. Se trata de Gozadera Records, con la cual quisieran ayudar a otros artistas “pero afecta la crisis de la industria del disco”.
Sobre componer en inglés, Los Amigos Invisibles dicen que ya lo han hecho y lo siguen considerando “porque vivimos en un país que se habla en inglés y se hace más natural. Vivimos más de la mitad de la vida en inglés”. Por primera vez en 18 años ellos están repartidos entre las ciudades de Miami y Nueva York. Como receta para mantenerse juntos en esta carrera tanto tiempo, consideran que es gracias a “la tolerancia, la pasión y la constancia”.
Para despedir el 2009 con broche de oro, tendrán dos conciertos el 20 de diciembre en Caracas, ya que “es un ritual anual tocar para cerrar el año”. Luego de un merecido descanso en su tierra cumplirán compromisos en República Dominicana, México, Washington D.C., Puerto Rico y España. En el 2010 prepararán su nueva producción discográfica con la espontaneidad que los ha caracterizado, “componemos lo que nos hace reír, lo que nos gusta. Siempre nos ha fastidiado la pose de los artistas, no porque pretendamos ser irreverentes. Nosotros trabajamos de músicos como otros trabajan de meseros”.